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Storytelling. No me lo expliques, cuéntamelo.
El storytelling es una metodología que se ha puesto muy de moda y que simplemente es “el arte de contar cuentos”.
Hace mucho que ya no tenemos interés ni capacidad para acopiar información per sé. Google está siempre a mano para resolver cualquier duda, de manera que solo conectamos el conocimiento con la información si la hacemos nuestra.
He visitado el Museo de Arqueología de Sant Martí de Empuries en donde hemos participado en una visita teatralizada.
Una guía vestida de patricia romana nos ha enseñado las ruinas y su historia con el hilo conductor de un cuento y un personaje central.
La visita está organizada en base a un guión que te lleva desde el conocimiento general y de contexto hasta los detalles más cotidianos.
Hemos repasado quienes eran los antiguos habitantes del asentamiento (los indiketas), las guerras púnicas (entre romanos y cartagineses), los griegos que llegaron primero y los romanos que desembarcaron los últimos y se quedaron con todo.
En el recorrido hay chistes, curiosidades, historias corrientes, comparaciones con la época actual e ingenio y chispa a la hora de darle mucho dinamismo a un contenido que podría ser aburrido.Aprendes, te empapas, te diviertes y sales más culto.

Esta visita me ha inspirado para escribir este post sobre los elementos de un buen storytelling.
1. Personaje central
Puede ser uno o varios, pero son imprescindibles. El personaje central son los ojos a través de los cuales digerimos esa información. Aprendiendo así, sin darnos cuenta.
2. Ritmo emocional
Un buen storytelling es como una buena peli… te ries, te engancha, te entretiene, te hace pensar y te hace soñar.
3. Historias simples
Para llegar a los conceptos grandes (que son abstractos y alejados), antes tendremos que pasar por las historias pequeñas que son las que conectan con el público. Siempre repara en lo simple, porque allí está la magia.
4. Cadencia y tempo
En el caso de la visita del Museo, el ser una visita actuada, este personaje marcaba todo el ritmo de lo que pasaba.
Cuando tu historia se desenvuelve en un libro o a lo largo de un blog, la cadencia y el tempo los dan la redacción impecable, el ritmo de lectura y el saber cuándo poner punto final sin excederse.
El storytelling es de esos artes ancestrales que estamos recuperando porque sin ellos la vida es puro código binario.
El lettering es otro arte gráfico manual que está de moda, pero esto necesita otro post…
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