BLOG | Estrategia, diseño y comunicación visual
Outsourcing de diseño. Insourcing de implicación.
Yo lo pienso desde el lado del emprendedor porque no dejo de verlo como un auténtico “chollo”.
Hace unos 10 años las empresas medianas y pequeñas podían permitirse tener un mínimo “departamento de diseño” que generalmente estaba cubierto por el diseñador de turno. Alguna otra empresa podía permitirse 2 o 3 perfiles complementarios, diseñador, copy o generador de contenidos y hasta webmaster.
La crisis nos ha traído recortes y ni siquiera las agencias de publicidad cuentan con tanto personal en plantilla como puede parecer a primera vista.
El outsourcing, o externalizar las tareas que no son tu “core business”, están a la orden del día.
Si eres emprendedor o directivo de una empresa pequeña o mediana, es un recurso que te interesará conocer porque te permite acceder a un nivel de realización gráfico y coherencia visual con un coste realmente accesible.
Con el outsourcing o servicio externo de diseño pasa un poco lo mismo.
Gracias a las nuevas tecnologías ya no es necesario que tenga sitio físico en la compañía ya que puede trabajar remotamente. Generalmente sus producciones son digitales de manera que lo mismo da que trabaje desde Asia ya que no hay costes logísticos ni es necesario esperar la llegada de paquetes.
Teniendo en cuenta estas posibilidades, sólo toca saber escoger al profesional que pueda llevar nuestro departamento de diseño externamente pero con el compromiso y la implicación de ser un empleado más de la compañía.
Lo más acertado es definir el campo de acción de este profesional, básicamente, de qué se ocupará. Es recomendable que sus actuaciones estén pensadas de manera de poder estandarizarse. Con esto me refiero a que se puedan traducir en plantillas que luego se empleen en los diferentes ámbitos y comunicaciones de la empresa. Es externo pero sus intervenciones me dan herramientas internas de diseño que luego de aplican a los documentos corporativos de la empresa.
Un gran empujón de branding empresarial lo ganarás cuidando los documentos y las comunicaciones del día a dia. Facturas, contratos, email, presupuesto, todo lo que hacen circular en un día debería ser revisado por este departamento creativo externo.De esa manera, con una actuación externa de outsourcing, tendrás impacto interno y de branding.
Lo habitual en una colaboración de outsourcing es definir unas horas mensuales o semanales y un precio/mes. Para que la interacción sea clara entre ambas partes, se recomienda como mínimo enviar un mail con el detalle de trabajo realizado y las horas empleadas, de manera de que la colaboración se base en la confianza y la transparencia.
Para llamarlo realmente outsourcing y que tenga un sentido de implicación real, debemos asegurar un mínimo de “contratación” de 6 meses. De esa manera, tanto el profesional externo como la compañía, pueden ir adoptándose el uno al otro y encontrando la forma de trabajar y cuajar sinergias y objetivos.
Para aprovechar al máximo esta intervención externa de outsourcing, se recomienda tener un plan de acción y unos materiales a desarrollar de antemano. Se debe tener en cuenta, así mismo, que no es lo mismo diseñar un anuncio teniendo que redactar textos y buscar imágenes que diseñarlo teniendo el material recopilado. Cada empresa hará el uso más inteligente y económico que considere y pueda de este profesional de outsourcing externo.
No dejes de conocer nuestro outsourcing creativo
Carina Stinga
Estrategia, marca y comunicación
Profesora UOC | Mentora BCN Activa
Como experta en branding y comunicación digital, acompaño a negocios, profesionales y PyMES a poner al día su visibilidad en internet para pasar de ser una marca indiferenciada a ser una marca que deja huella.
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