BLOG | Estrategia, diseño y comunicación visual
Storytelling. No lo expliques, cuéntalo.
El storytelling es una técnica utilizada desde la época en que las abuelas explicaban cuentos a sus nietos antes de ir a dormir. Nos gusta que nos cuenten cosas, nos aburre que nos den información. En nuestra época de la híper información, esta máxima es, hoy día una verdad absoluta.
El esfuerzo de leer que pedimos a nuestro público a veces puede ser un escollo que haga que nuestro contenido pase desapercibido.
Hoy más que antes una imagen vale más que mil palabras. En la sabia combinación de una buena historia y un desarrollo visual bonito y divertido están los ingredientes que hagan de nuestro storytelling un caso de éxito.
Fases para estructurar un storytelling. ¿Cómo lo creamos?
Paso 1: Define tu público, a quién le hablas.
Conócelo para saber dónde está, qué hábitos tiene, cómo se relaciona con el producto, servicio o sector que quieres ofrecerle. En los casos en que aquello que ofreces es novísimo, busca alternativas similares para situar como está tu público hoy en una situación similar.
Paso 2: Piensa en la historia que te gustaría que te cuenten.
No tengas miedo de tener ideas extravagantes o demasiado creativas. En el momento brainstorming todas cuentan y todas valen. Primero tendrás que encontrar tu modo de escribir, aquel en el que te sientas cómodo y sientas que estás aportando algo diferente. Hoy la diferenciación es la clave, y a la vez es lo más complicado de conseguir. Todos intentaremos, de una manera u otra, ceñirnos a los formatos que vemos, porque los damos por buenos. Intenta romper esa barrera de aceptar las cosas como están hechas y llegarás a TU aportación personal. Busca la complicidad, el tono del mensaje, qué quieres destacar, cuáles son las ideas clave con que quieres que tu público se quede.
Paso 3: Los personajes
Si a grandes rasgos sabes qué podrías explicar, define también a los personajes que participarán en la historia. Ellos son tu público porque, literalmente, buscas que se identifiquen con ellos. De manera que en esta parte retomas el primer punto y haces una especie de ficha de tu buyer persona. A estas alturas sabes ya cómo se viste, qué tipo de ocio tiene, qué tipo de vida lleva, sabes su rango de edad así como sus intereses y aficiones. Cuanto más controles estos datos, más asertiva será tu campaña basada en storytelling.
Paso 4: No esperes que lean aquello que escribes, hazlo atractivo y dale gancho visual
Observa cómo te mueves en el mundo digital y entre un dispositivo y otro. Toma nota de cuándo lees un post y cuando lo pasas por alto. Piensa qué hace que hagamos click y accedamos a ese contenido. En la mayoría de los casos es el recurso visual empleado el que nos da la pauta. Nos seduce, clickamos. Lo vemos standard o “uno mas”, pasamos de largo. Esta máxima es importante de recordar. Cuando tengas la historia y los personajes de tu storytelling, aún estás a la mitad del camino. Juegate la gráfica para que sirva como reclamo comercial para que “entren” a tu tienda, a tu mundo, a tu post.
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